Fátima y Diego.

Yo no puedo hablar sino de dos hermanos que tiene un poquito de mi sangre y que llegaron a mi vida en distintas situaciones les diré por qué.

Ella se llama Fátima, a penas tienes 1 año y 8 meses, ma , titi, agua, son las palabras que escucho mientras estoy en casa, por otro lado , diego con 8 años , ¿hermana cuando me llevas a tu casa?, son las palabras que oigo siempre que me encuentro con mi gordo, como yo le digo.

A Fátima la conocí cuando estaba en la panza de mi mama. ¡No sabes que tengo!, fueron las palabras de mi madre antes de decirme que esta embarazada, en septiembre del 2004, en cambio a diego nunca lo vi en la barriga a él lo conocí un jueves santo del 1997 sin querer, a Fátima la vi crecer, con diego solo me conformé con el poco tiempo, por que mis padres a pesar de tener cada uno su pareja me hicieron muy feliz regalándome a mis dos hijos, como yo los llamo.

A veces me siento mal cuando llego a casa de mi abuela y veo que mi hermano crece y a la ves se engorda y no poder ver realmente en que momento paso eso; y como me deprime no saber cuando lo volveré a ver, que el tiempo pasa tan rápido, que no lo vi crecer, pero no me quejo de eso pues por eso a mi vida llego Fátima para poder verla crecer, verla gatear, caminar, crecer, y si Dios quiere verla enamorarse, llorar y soñar.

Lo único que comprendo es que Dios es sabio y si te quita algo te da el doble, por eso le agradezco por ese par de angelitos, claro que uno parece un angelito doble y la otra un angelita Light, pero igual gracias.